Vivance, ciencia aplicada y estrategia nacional: la apuesta de Grupo Bios en un mercado que exige credibilidad
En un ecosistema cada vez más competitivo, el segmento de la nutrición para mascotas en Colombia vive un punto de inflexión. El crecimiento sostenido del sector —impulsado por la profesionalización clínica, la sofisticación del tutor colombiano y la madurez de los canales especializados— obliga a las marcas a reconfigurar sus portafolios y a demostrar, con hechos, cómo la ciencia se traduce en bienestar, resultados clínicos y reputación para el médico veterinario. En ese contexto, Grupo Bios, tradicionalmente reconocido por su liderazgo industrial, consolida un giro estratégico: posicionarse como un actor técnico, confiable y capaz de acompañar a la medicina veterinaria del país en su transición hacia una nutrición basada en evidencia.
Durante el congreso veterinario en Colombia organizado por VEPA en Medellín, Alejandro Ramos —médico veterinario zootecnista y coordinador técnico de mascotas en Grupo Bios— profundizó en esa visión. Su mensaje, más que promocional, fue una declaración de principios: “Nutrición es medicina preventiva, y la industria colombiana tiene la capacidad de producir con estándares que compiten con cualquier otro país”.
Lo que sigue es un análisis empresarial de esa conversación, y de lo que revela sobre la evolución del mercado, el rol del conocimiento técnico y la estrategia de Grupo Bios frente al futuro de la nutrición pet.
1. Una industria en transición: del producto al conocimiento
Hasta hace pocos años, la competencia en alimento concentrado para mascotas se centraba en el precio, el marketing emocional y, en menor medida, en la disponibilidad en retail. Hoy el panorama es otro: los médicos veterinarios han asumido un papel decisivo como asesores en nutrición, y los tutores buscan dietas con impacto clínico tangible, trazabilidad en ingredientes y coherencia científica.
Esa transformación es más evidente en escenarios académicos como el congreso veterinario en Colombia, donde las preguntas ya no giran únicamente en torno a proteínas y porcentajes, sino a salud gastrointestinal, integridad de la barrera inmunológica, alergias alimentarias, microbiota, neurodesarrollo y manejo de inflamación.
Ramos lo sintetiza así: “Todo entra por la boca. Si nutrimos bien a un cachorro desde el inicio, lo vemos reflejado en su etapa adulta y senior”. Esta afirmación, lejos de ser retórica, refleja la nueva lógica del mercado: la nutrición dejó de ser un commodity y se convirtió en un componente central de la medicina preventiva y el cumplimiento clínico.
Para Grupo Bios, este cambio se traduce en un rol más técnico y cercano al consultor que al proveedor. Y en la entrevista, Ramos deja claro que ese es el camino que están recorriendo: multiplicar conocimiento, acompañar clínicas y ofrecer soporte basado en evidencia.
2. Vivance Vitality: ciencia funcional en clave local
El lanzamiento de Vivance Vitality, la línea holística y funcional de Grupo Bios, responde a un diagnóstico contundente: Colombia tiene un creciente número de pacientes con piel sensible, pelajes exóticos, predisposiciones genéticas particulares y una mayor incidencia de alergias alimentarias.
El reto ya no es solo alimentar: es prevenir, regular, fortalecer.
La formulación de Vivance evidencia esa intención. Ramos detalla los ingredientes como quien presenta una ecuación farmacológica:
- Cinco cepas probióticas con 3,7 millones de UFC para modular la microbiota.
- Ceolita, una arcilla que mejora la absorción de nutrientes y regula la consistencia fecal.
- Alga Schizochytrium, fuente de DHA para neurodesarrollo en cachorros y manejo de inflamación en adultos y senior.
- Quillaja, con propiedades inmunomoduladoras similares a las de la yuca schidigera.
- Minerales orgánicos, que optimizan biodisponibilidad y apoyan el crecimiento.
- Proteínas de alto valor biológico: pollo, cordero, atún, huevo y leche deslactosada para cachorros.
La propuesta es clara: un alimento diseñado para intervenir dos grandes frentes clínicos —la salud digestiva y la salud cutánea— evitando los ingredientes con mayor asociación a alergias: maíz, trigo, sorgo y gluten.
No es casual. En la conversación, Ramos enfatiza que los mejores resultados se están observando en pacientes con colores merle, azul, diluidos o con áreas despigmentadas, y en razas susceptibles a dermatitis por barrera cutánea frágil.
En un mercado donde el tutor exige explicaciones precisas y el médico veterinario necesita argumentos clínicos sólidos, la evidencia funcional no es un accesorio, sino el nuevo estándar competitivo.
3. La nutrición como activo estratégico para la clínica veterinaria

Uno de los elementos más interesantes de la conversación con Ramos es la articulación entre ciencia nutricional y estrategia para la clínica veterinaria. No se trata únicamente de la composición del alimento, sino del impacto en la experiencia del consultorio.
Tres puntos merecen destacarse:
a) Diagnóstico más claro, cumplimiento más alto
Cuando un alimento mejora tránsito intestinal, reduce procesos inflamatorios, estabiliza piel y fortalece el sistema inmune, el médico veterinario puede tomar decisiones clínicas más precisas. Menos ruido, menos variabilidad, menos síntomas enmascarados por dietas inadecuadas.
b) Menos PQR, más adherencia
Los alimentos que gestionan salud digestiva desde la base reducen significativamente las consultas por diarrea, flatulencia, picazón y otitis recurrentes. Este impacto, aunque técnico, tiene un valor comercial directo: disminuye reclamaciones, mejora la percepción del tutor y fortalece la relación con la clínica.
c) Modelo de valor continuo
A diferencia de los tratamientos farmacológicos, la nutrición genera consumo recurrente y fidelización. Para una clínica, la recomendación nutricional basada en resultados se convierte en un activo económico estratégico.
Ramos lo explica con sencillez: “Si la barrera digestiva funciona bien, todo el organismo responde mejor”. La frase, aunque técnica, es también un planteamiento empresarial: un paciente con salud integral es un paciente que vuelve, confía y sostiene el flujo de ingresos del consultorio.
4. Industria colombiana: un mensaje de soberanía y capacidad
Uno de los momentos más relevantes de la entrevista es cuando Ramos subraya: “Somos industria 100% colombiana, y la calidad es nuestra”.
En un país acostumbrado a “importar prestigio”, esta afirmación va más allá del orgullo patrio; es parte de una estrategia empresarial coherente con las tendencias globales:
- Reducción de dependencia internacional.
La pandemia dejó claro que la seguridad alimentaria —incluida la de mascotas— depende de la capacidad de producción local. - Trazabilidad y frescura.
Los alimentos fabricados en el país reducen tiempos de almacenamiento y transporte, mejorando estabilidad nutricional. - Adaptación al mercado colombiano.
Las formulaciones desarrolladas desde la experiencia local responden mejor a las particularidades de la población canina nacional. - Competitividad por innovación funcional.
La ciencia aplicada no es exclusiva de mercados extranjeros; el portafolio de Grupo Bios lo demuestra.
En el marco del congreso veterinario en Colombia, donde se reúnen médicos, académicos y líderes del sector, este mensaje resonó especialmente fuerte: la capacidad industrial colombiana existe, y está evolucionando hacia modelos basados en conocimiento.
5. La estrategia comercial detrás del portafolio
Más allá de la ciencia, la conversación con Ramos revela una movida estratégica de Grupo Bios para fortalecer su presencia en el canal especializado:
- Tres visitadores médicos a nivel nacional, en Cali, Medellín y Bogotá.
- Un enfoque agresivo en capacitación y soporte técnico.
- Integración entre áreas comerciales, científicas y de servicio al cliente.
- Disponibilidad nacional asegurada a través del ecosistema Bios–Finca–Contegral.
El mensaje es claro: el mercado de alimentos Super Premium y holísticos no se gana con publicidad, sino con acompañamiento técnico, consistencia y conversación clínica.
En otras palabras: el futuro de la nutrición pet en Colombia será de las marcas capaces de entender que la clínica es el punto de verdad de su promesa de valor.
6. Desde el stand: retroalimentación real, adopción real
Ramos destacó que, tras menos de un año en el mercado, Vivance Vitality ya genera comentarios positivos, especialmente en pacientes con piel sensible y colores exóticos.
Esta retroalimentación temprana es clave por tres razones:
- Validación del concepto funcional.
La adopción clínica depende de resultados visibles, y los colegas están reportando mejoras. - Alineación con tendencias globales.
El crecimiento de perros braquicéfalos, exóticos y de razas susceptibles a dermatitis exige soluciones integrales. - Escalabilidad del portafolio.
Un buen desempeño inicial crea terreno fértil para futuras líneas dentro de la plataforma Vivance.
En un entorno saturado de promesas de marketing, el insight más valioso siempre será el comportamiento real dentro de las clínicas.
7. Un mensaje al mercado: evidencia, cercanía y evolución
Hacia el final de la entrevista, Ramos deja una invitación que sintetiza la estrategia de Grupo Bios:
“Que prueben el producto. Ya hay colegas y propietarios con resultados reales. Y que nos visiten, que nos encanta la retroalimentación”.
Lejos de sonar como una frase de cierre, es un llamado a construir una relación distinta entre industria y clínica: más colaborativa, más técnica y más orientada a resultados.
En el contexto del congreso veterinario en Colombia, donde la ciencia y la práctica se encuentran, este enfoque hace sentido. El médico veterinario no busca promesas: busca aliados, datos y soporte.
Y ese es el terreno donde Grupo Bios está decidiendo competir.
Una narrativa empresarial coherente
La entrevista con Alejandro Ramos revela algo más profundo que el lanzamiento de un producto. Refleja un cambio estructural en la industria colombiana de nutrición para mascotas:
- Ciencia funcional como eje central.
- Soberanía industrial con visión global.
- Estrategia comercial basada en acompañamiento y evidencia.
- Respuesta directa a necesidades clínicas reales.
- Conversaciones técnicas como instrumento de confianza.
Este es el tipo de narrativa que, en mercados maduros, distingue a los líderes de los competidores oportunistas.
A medida que el canal especializado crece y los tutores exigen respuestas más sofisticadas, la nutrición deja de ser una categoría transaccional y se convierte en un componente crítico de la práctica veterinaria moderna.
Grupo Bios parece haber entendido ese punto con claridad.
Vivance no es solo un alimento; es un mensaje: Colombia puede producir ciencia aplicada con impacto clínico real. Y ese mensaje, expuesto en un congreso veterinario en Colombia, marca un precedente para el rumbo que tomará el sector en los próximos años.

