Lo que da rabia es no vacunar: Un llamado a la responsabilidad en la industria de mascotas en Colombia
En el mundo de la medicina veterinaria y la industria de las mascotas, la prevención siempre ha sido la piedra angular del cuidado animal. Sin embargo, a pesar de los avances científicos, la rabia sigue siendo una amenaza mortal que afecta a miles de personas y animales cada año. A 140 años de que Louis Pasteur desarrollara la primera vacuna contra esta enfermedad, una persona sigue muriendo de rabia cada 9 minutos en el mundo. Lo más alarmante es que esta cifra es totalmente prevenible, lo que pone en evidencia una brecha preocupante en la implementación de medidas de control.
Para los médicos veterinarios y empresarios de la industria de mascotas en Colombia, este panorama ofrece una oportunidad clave para liderar la lucha contra esta zoonosis, que es 100% prevenible mediante la vacunación. Según datos recientes, alrededor de 60 mil personas mueren al año debido a la rabia, y el 40% de estas víctimas son niños menores de 15 años. Aunque la vacunación puede proteger tanto a humanos como a animales, sigue existiendo una falta de consciencia en la tenencia responsable de mascotas y el cumplimiento de los esquemas de vacunación.
La importancia de la vacunación en la industria de mascotas
El rol de los veterinarios y empresarios es esencial en la implementación de programas efectivos de vacunación. No solo actúan como proveedores de servicios, sino también como educadores y líderes en la promoción de la salud pública. La vacunación antirrábica no solo protege a perros y gatos, sino que también reduce el riesgo de transmisión del virus a los humanos. Biogénesis Bagó, empresa que ha liderado múltiples campañas de concientización, destaca que la colaboración entre veterinarios, industrias de salud animal y organismos oficiales es crucial para diseñar estrategias sanitarias que logren erradicar la rabia de manera efectiva.
Oportunidades para veterinarios y empresarios en la lucha contra la rabia
Biogénesis Bagó subraya la importancia de los veterinarios como principales actores en la promoción de la vacunación. A través de capacitaciones y soluciones biotecnológicas de alta calidad, los profesionales de la salud animal pueden implementar estrategias sanitarias robustas que garanticen una tenencia responsable. Esto es especialmente relevante en un país como Colombia, donde la rabia todavía representa un riesgo en áreas rurales y urbanas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha establecido como meta para el 2030 la erradicación de las muertes humanas por rabia transmitida por perros. Para alcanzar este objetivo, es fundamental que la industria de mascotas trabaje en conjunto, fomentando la educación y la vacunación anual de perros y gatos. Además, los empresarios del sector tienen la oportunidad de generar iniciativas que promuevan la responsabilidad social, colaborando con organizaciones y campañas que visibilicen la importancia de esta enfermedad y su prevención.
La responsabilidad comienza en casa: vacunar es salvar vidas
La rabia es una enfermedad que mata al 99% de los afectados, pero es completamente prevenible. En ese sentido, los veterinarios y empresarios de la industria de mascotas tienen la responsabilidad de comunicar a sus clientes y empleados la importancia de vacunar a sus mascotas de manera constante. Esta acción no solo salva la vida de los animales, sino que también protege la salud de las familias y la comunidad.
Biogénesis Bagó ha demostrado su compromiso con esta causa, colaborando con la Fundación Mundo Sano y la Alianza Mundial para el Control de la Rabia. Iniciativas como “End Rabies Now” buscan concientizar a la población global sobre la importancia de erradicar la rabia y fomentar prácticas responsables entre los dueños de mascotas.
La rabia es una enfermedad devastadora, pero la buena noticia es que su erradicación está al alcance de nuestras manos. Los médicos veterinarios y empresarios de la industria de mascotas en Colombia tienen un rol protagónico en este esfuerzo, liderando la vacunación y educando a la población sobre la tenencia responsable. La colaboración entre las partes —industria, organismos oficiales, y profesionales veterinarios— es esencial para garantizar un futuro libre de rabia, protegiendo no solo a nuestras mascotas, sino también a las personas que más amamos.
Porque al final del día, lo que realmente da rabia es no vacunar.